La época del embarazo y post parto son muy especiales en la vida de una mujer; de hecho marcan un antes y un después en el ciclo vital, con muchos beneficios y satisfacciones personales y emocionales, pero también con implicaciones sobre el cuerpo a las que hay que prestarle atención. Durante el embarazo el cuerpo de la mujer retiene líquidos por el necesario aumento hormonal, hormonas que actúan reabsorbiendo sodio, lo que hace que retenga líquidos (hasta 8 litros de agua más de lo que se retiene habitualmente). A partir del tercer mes de embarazo se comienza a generar una acumulación de agua en el cuerpo, que provoca aumentos de volumen (principalmente hinchazón en piernas y abdomen). Esta retención de líquidos es la responsable de la pérdida de elasticidad que sufre la piel durante esta etapa y contribuye a la aparición de estrías. Después del parto podemos observar alteraciones de la distribución de la grasa corporal, aumento de volumen, retención de líquidos, aumento de peso y cambios en la pigmentación de la piel; alteraciones y anomalías en pechos y zona vagina. Sabemos la importancia de la imagen y la salud antes y después de la llegada de un bebe. Por lo que hemos desarrollado protocolos específicos que nos dan la oportunidad de adelantar la recuperación del cuerpo y devolver a su sitio todo aquello que fue modificado o alterado durante el embarazo y el parto adaptándonos a las necesidades y exigencias de cada etapa, para lograr mantener el cuerpo a través de diferentes tratamientos.
